Recibí varias felicitaciones por el día internacional de la mujer. Supongo que fracasé entonces como feminista, porque es gente cercana. O no tanto todavía, pero me estoy cansando y rindiendo de tanto topar con una pared. Parece que no hay nada que haga que la gente no feminista quiera dialogar sobre el tema y aprender. Hay un punto tierno, intermedio, en el que las personas son abiertas y están dispuestas a escuchar, a debatir. Busco a esa gente. Al resto no quiero hablarle más.