Muchas de las veces que en una conferencia menciono algo sobre derechos humanos, surge algún comentario sobre cómo las derechohumanistas somos las responsables del aumento de la criminalidad y la violencia en este país.
Cuando hablo sobre Amnistía Internacional, la gente se queja de que se defiende a los criminales. Entre otros DDHH, exige que cada persona acusada de un delito tenga un juicio justo, y se respeten sus derechos humanos, no que las autoridades actúen como si nada hubiera pasado. Eso, y la regulación de algunas leyes absolutamente violatorias de los DDHH, como en algunos países como Nigeria donde se apedrear a una mujer por adulterio (véase el caso de Amina Lawal, a pesar de que las autoridades nigerianas después dijeron que jamás hubo tal condena y etcétera).
He escuchado personas diciendo que a los violadores sería mejor matarlos o castrarlos, que procesarlos normalmente, legalmente, (no he escuchado comentarios sobre violadoras, por cierto), y que quienes trabajamos a favor de los DDHH lo único que hacemos es defenderlos sin tomar en cuenta todo el daño que causaron. Ni yo, ni algún otro u otra derechohumanista que yo conozca quiere que un violador (o violadora), un o una homicida, o cualquier otro tipo de criminal, quede exento o exenta de cumplir una condena establecida legalmente, sensata y justa (sin meterme más a fondo en el significado de justicia, sabemos que ese tema es amplísimo y digno de un debate de horas).
Lo único que queremos es que los derechos humanos de cualquier persona sean respetados, y que los juicios sean justos. No es tan complicado ¿o sí?
Cuando hablo sobre Amnistía Internacional, la gente se queja de que se defiende a los criminales. Entre otros DDHH, exige que cada persona acusada de un delito tenga un juicio justo, y se respeten sus derechos humanos, no que las autoridades actúen como si nada hubiera pasado. Eso, y la regulación de algunas leyes absolutamente violatorias de los DDHH, como en algunos países como Nigeria donde se apedrear a una mujer por adulterio (véase el caso de Amina Lawal, a pesar de que las autoridades nigerianas después dijeron que jamás hubo tal condena y etcétera).
He escuchado personas diciendo que a los violadores sería mejor matarlos o castrarlos, que procesarlos normalmente, legalmente, (no he escuchado comentarios sobre violadoras, por cierto), y que quienes trabajamos a favor de los DDHH lo único que hacemos es defenderlos sin tomar en cuenta todo el daño que causaron. Ni yo, ni algún otro u otra derechohumanista que yo conozca quiere que un violador (o violadora), un o una homicida, o cualquier otro tipo de criminal, quede exento o exenta de cumplir una condena establecida legalmente, sensata y justa (sin meterme más a fondo en el significado de justicia, sabemos que ese tema es amplísimo y digno de un debate de horas).
Lo único que queremos es que los derechos humanos de cualquier persona sean respetados, y que los juicios sean justos. No es tan complicado ¿o sí?
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